ENE PUCV participa en almuerzo solidario en Comedor de Parroquia La Matriz
El viernes 6 de septiembre, y por segundo año consecutivo, 11 voluntarios -en representación de la Escuela de Negocios y Economía PUCV- participaron en la preparación de desayunos y almuerzos en el Comedor 421 de la Parroquia La Matriz, en Valparaíso.
El Comedor reúne diariamente a cientos de personas en situación de calle y vecinas/os del Barrio Puerto. La PUCV, a través de sus diversas unidades académicas y administrativas, apoya esta labor los días viernes, en la preparación y posterior atención de las personas que concurren a este espacio.
En esta oportunidad, 6 académicos y 5 estudiantes de ENE PUCV, fueron quienes se encargaron de la atención de la jornada.
Pablo Escárate, jefe de Vinculación con el Medio de ENE PUCV, destacó que "fue una experiencia gratificante en la que profesores y estudiantes pudimos contribuir con un granito de arena al enorme trabajo que día a día hace la corporación La Matriz y el equipo de voluntarias que, de forma desinteresada, entregan un apoyo fundamental a las personas que acuden día a día al comedor”.
“Esta experiencia es fundamental para la formación integral de nuestros estudiantes y parte central del sello valórico de la PUCV, contribuyendo a la generación de impactos positivos en la comunidad; como Escuela estamos agradecidos de esta oportunidad, facilitada por la Pastoral PUCV y esperamos poder seguir participando de estas actividades en el futuro", complementó el académico de ENE PUCV.
María José Ortega, estudiante de Ingeniería Comercial que participó como voluntaria, señaló que “la experiencia fue muy agradable y enriquecedora; es lindo ver que día a día hay personas que se esfuerzan y hacen un aporte para mejorar el día y la vida de gente que lo necesita”. Agregó que “ver a personas tan solidarias me motiva a querer ser un aporte dentro de la sociedad y a no solo pensar en el bienestar propio. Creo que cualquier gesto solidario, por más pequeño que sea, hace una gran diferencia, y es importante no ser indiferente, ya que todas las ayudas impulsan a que mejoremos como sociedad”.
La joven destacó que “además, fue una instancia distinta y entretenida poder compartir con distintos profesores en un contexto diferente al de las clases, y también compartir con compañeros de la carrera con quienes quizás nunca había tenido la oportunidad de interactuar”.
Cabe destacar que esta iniciativa forma parte de un programa de vinculación permanente con el Barrio Puerto, el que ha contribuido al bienestar de las y los habitantes de este significativo barrio porteño y sus cerros cercanos.