23.06.2017

La década de 1960 fue un periodo de fuertes cambios tanto en Chile como en el mundo. Estos se reflejaron en un periodo de grandes cuestionamientos e innovaciones que se plasmaron en la política, la ciencia, la cultura popular, el cine, la música y también en la educación.  

En este contexto, en nuestra Casa de Estudios se originó un proceso de Reforma Universitaria en 1967, movimiento que después se extendió a otras siete instituciones en el país y remeció la tradicional estructura de la Católica de Valparaíso, modificando su misión, las relaciones con la sociedad, la estructura del gobierno universitario y otros aspectos.

Al respecto, un comité integrado por dirigentes estudiantiles de la Federación de Estudiantes de nuestra Casa de Estudios de 1967 y de 2017, junto con un grupo profesores reformistas del año 67, con apoyo de la Dirección General de Vinculación con el Medio de la PUCV, organizaron un amplio programa de actividades que incluyó encuentros, lanzamiento de libros, actos académicos, con el objetivo de proyectar la trascendencia que tuvo este proceso tanto para la institución como para el país.

El miércoles 21 de junio se realizó un panel en el Salón de Honor donde se abordó el ámbito de la gobernanza universitaria en un espacio de encuentro de la comunidad entre profesores, estudiantes y funcionarios. En la ocasión, se analizó el diálogo entre fe y ciencia, la educación como un derecho, la participación estudiantil y la vinculación entre la Universidad y su entorno. La mesa fue moderada por el director del Centro de Estudios Avanzados y Extensión (CEA) de la Universidad y exalumno, Manfred Wilhelmy.   

En la ceremonia de cierre, realizada el jueves 22 se efectuó el panel titulado “Rol de las ciencias sociales en la Universidad de hoy”, donde participaron como expositores el director del Magíster en Relaciones Internacionales PUCV y ex rector, Raúl Allard; el ex director del Instituto de Ciencias Sociales de la Universidad; Fernando Molina; y el presidente de la Federación de Estudiantes de 1967, Luciano Rodrigo.  

Entre los asistentes, estuvo el embajador de Chile en Guatemala y exalumno de Trabajo Social de la Universidad, Domingo Namuncura. A la actividad, asistió el rector de la PUCV, Claudio Elórtegui, quien destacó que el proceso de reforma en esta Universidad, tal como ha sido analizado por diversos especialistas en la materia, fue pionero en el sentido de que fue el primero en Chile. “Las otras instituciones existentes hasta ese momento se fueron sumando a partir de sus respectivas realidades. Acá en la Universidad, el movimiento tuvo rasgos especiales y contó con un conjunto de elementos que eran centrales en el grupo de los reformistas de 1967 y que permanecieron en el tiempo”, planteó.

El rector Elórtegui, que ingresó como estudiante a nuestra Casa de Estudios en 1969, recordó que se superó el concepto de universidad “profesionalizante” y se dio un lugar especial a disciplinas como las ciencias, las artes y las humanidades que se radicaron en lugares específicos. “Así se fueron creando los institutos y las escuelas profesionales. Este fue un elemento innovador y que iba en la línea de acercarnos como institución a las buenas universidades de nivel mundial”, destacó.

PROFESOR MOLINA: “ES UN PROCESO PERMANENTE”

El profesor Fernando Molina, quien fue director del Instituto de Ciencias Sociales de la Universidad, expuso sobre los desafíos que enfrentó la comunidad de la UCV a fines de la década de los años 60 y agregó que la Reforma Universitaria, fue un hito histórico, pues ha perdurado virtualmente en sus consecuencias, cambiando la esencia de la Universidad.

“Aquí se quebró el modelo profesional napoleónico y la Universidad nunca volvió a ser la misma (…) La Reforma Universitaria hay que entenderla como una evolución permanente. El hombre va cambiando siempre y no sabemos dónde va a terminar. Pasa con la humanidad, lo mismo con las universidades”.

Molina recordó algunos aspectos de los años 60, en el contexto de la Guerra Fría, donde el mundo vivió la crisis de los misiles, la construcción del muro de Berlín y la creación de internet que fue pensada en un comienzo como un arma de guerra. “La impronta de la década de 1960 se debe comprender para entender la Reforma. Fue un periodo donde cambió el mundo y parte de ese ambiente estaba en este lejano lugar en Valparaíso”, recordó.

Por su parte, el exrector Raúl Allard señaló que la Reforma fue un movimiento muy innovador que recogió una dinámica de cambio en este periodo de mediados del siglo XX y destacó la labor de la generación de 1967 que asumió un vigoroso proceso de cambio universitario y de esta manera un compromiso social con el país.

“Fue un proceso innovador, capaz de cambiar estructuras académicas e institucionales y, al mismo tiempo, aplicar en la realidad un modelo en forma eficaz. El proceso tuvo un carácter nacional, generó gran efervescencia en los campus de las ocho universidades de la época y marcó a la generación estudiantil que la impulsó, en especial a los dirigentes para quienes ha sido una referencia permanente”, precisó.

Allard mencionó como principios de la Reforma: la catolicidad, la democracia, el carácter comunitario, el fomento de la participación, un mayor espacio a la ciencia y la investigación, la reorganización de las escuelas profesionales, el fomento de los centros y la interdisciplina, la orientación reflexiva de los procesos socioculturales y una visión del desarrollo integrador a nivel latinoamericano.   

Luego vino la ponencia del exdirigente estudiantil Luciano Rodrigo y la actividad finalizó con la realización de un cóctel en la Casa Central de la PUCV.

Por Juan Paulo Roldán

Dirección General de Vinculación con el Medio