Con el objetivo de compartir los logros obtenidos y destacar la labor de quienes participan en el Programa de Tutorías de Pares, la Unidad de Apoyo al Aprendizaje organizó la primera Ceremonia de Reconocimiento de Tutores y Profesores, que contó con la presencia de directores y directoras de unidades académicas, estudiantes, docentes de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y familiares.
La directora de Pregrado, Jannett Fonseca, expresó que “la Unidad de Apoyo al Aprendizaje se ha dedicado a explorar e implementar nuevas formas de apoyar el aprendizaje de los estudiantes de la Universidad. No sólo buscamos mejorar el rendimiento académico, sino que también enriquecer de manera integral la experiencia de aprendizaje de forma global. Detrás de esta labor hay un equipo profesional comprometido, que se encuentra en la búsqueda continua de mejoras para apoyar el desarrollo de los estudiantes, sin perder de vista el objetivo principal: transformar vidas. El propósito es garantizar que la experiencia de aprendizaje en esta universidad sea especialmente positiva, porque todos podemos aprender”.
Entre las estrategias destacadas, se encuentran el Programa de Tutorías de Pares, cuyo propósito es fortalecer en los estudiantes de las competencias necesarias para un desempeño exitoso en las distintas asignaturas de su plan de estudios, y el Programa de Reforzamiento en Ciencias Básicas (PREMATE, PREFRIS, PREQUIM), que consiste en espacios de apoyo académico dirigido a estudiantes en donde estos pueden resolver dudas, ejercitar y recibir apoyo personalizado antes de rendir las pruebas de cátedra en el área de matemática y física.
GRANDES RESULTADOS
En la instancia, se presentaron los avances y resultados alcanzados en el período, destacando la participación de 216 tutores y 42 profesores, quienes contribuyeron al proceso formativo de cerca de cuatro mil estudiantes de la nuestra casa de estudios.
Dina Pablo Herrera, estudiante de primer año de la carrera de Contador Auditor, fue beneficiaria de este programa durante este año. Respecto a su proceso, expresó que “todos estos apoyos han facilitado mi proceso de adaptación a esta nueva etapa universitaria, ya que han logrado nivelar mis conocimientos previos, maximizando mi forma de aprender. Me fue de gran ayuda tener la posibilidad de resolver mis dudas cómodamente, tanto con un profesor en los reforzamientos como con una estudiante de mayor experiencia en las sesiones de tutoría”.
En agosto de este año se realizó la Escuela de Tutores y Tutoras, un espacio de formación que incluyó una serie de capacitaciones enfocadas en metodologías y estrategias de estudio, autocuidado y comunicación efectiva. Estos esfuerzos se reflejaron en la percepción del estudiantado, donde el 88% expresó estar satisfecho o muy satisfecho con la implementación del acompañamiento académico.
Al respecto, Martín Ayala, tutor que forma parte del programa hace seis semestres, destacó que la escuela “fortaleció nuestra formación para insertarnos en el mundo laboral. Este proceso nos permitió desarrollar una mayor autopercepción de nuestras capacidades y habilidades; la adaptabilidad, el trabajo colaborativo y el pensamiento crítico, son altamente valoradas en el mundo laboral. La formación nos impulsó a reconocer nuestro potencial y a entender cómo aplicarlo en contextos laborales dinámicos y exigentes”.
Por su parte, Felipe Gallardo Vargas, profesor del PREQUIM, comentó que el programa le ha permitido “mantener vigente el conocimiento y las habilidades que se requieren para desarrollar de manera satisfactoria cada sesión al nivel que nuestra casa de estudios exige a sus estudiantes. Además, al conocer un fragmento de la realidad de ellos, me ha permitido valorar cada vez más la importancia académica y valórica de la labor que cada docente de los programas de reforzamiento realiza semana tras semana, a quienes aplaudo por su trabajo, el cual estoy seguro que es valorado por sus estudiantes”.
Por Fernanda Pizarro
Dirección de Pregrado
