Esta semana, el Cardenal José Tolentino de Mendonça, Prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación, reflexionó sobre los cuatro elementos que marcan la diferencia en las instituciones educativas católicas: la identidad, la misión, el diálogo y la pastoral universitaria.

Al Cardenal le pareció conveniente proponer que se examine un camino a seguir, considerando que “la educación es un acto de esperanza que, desde el presente, mira al futuro”.

Al respecto, el Vice Gran Canciller de nuestra Casa de Estudios, Cristian Eichín, planteó que estas características se encuentran presentes en la PUCV a la luz de la Encíclica Ex Corde Ecclessiae. “Recientemente presentamos un libro que aborda este documento desde una mirada interdisciplinaria, donde reflexionamos sobre el reconocimiento, la hospitalidad y la misión y desde marzo vamos a retomar una nueva línea de trabajo con la Pastoral Universitaria, lo que sin lugar a dudas se enmarca con esta reflexión del Dicasterio”, expresó.

Sobre la identidad, el Cardenal Mendonça señaló que “sin ella la universidad se alejaría de la misión de educar, a ejemplo de Jesús, el Maestro, y se convertiría en una fábrica de títulos profesionales”.

Respecto a la misión, el Prefecto expresó que una institución educativa católica debe evitar la aspiración de convertirse en una parroquia o en un grupo de devoción. En cuanto al diálogo, la autoridad del Vaticano planteó que forma parte de la dimensión constitutiva de todo ser humano, y repasó tres indicaciones fundamentales del Papa Francisco para favorecerlo. Ellas son: el deber de la identidad, la valentía de la alteridad y la sinceridad de las intenciones.

Sobre la pastoral universitaria, el Cardenal agregó que “si queremos que nuestro futuro esté comprometido con la sociedad fraterna que deseamos, se hace necesario reflexionar, partiendo del Kerygma, en la pastoral universitaria que necesitamos ahora y que podría influir en el advenir”.

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