10.09.2021

Rodrigo Armijo y Nicolás Alvear, alumnis de la Escuela de Ingeniería Industrial de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), desde 2019 están desarrollando el proyecto  Retina RX, que busca detectar hallazgos críticos en radiografías de tórax para priorizar la lista de trabajo de la unidad de imagenología. Durante este tiempo los jóvenes han pasado por distintas instancias de la PUCV, donde han sido apoyados tanto financieramente como en formación, lo que les ha permitido pivotear su proyecto, mejorar y definir ciertos puntos clave.

Desde el inicio hasta hoy, Retina RX ha pasado por distintas etapas, donde han incluido a nuevos miembros, siendo formalmente tres personas quienes llevan este proyecto actualmente, donde se encuentran los cofundadores, Rodrigo Armijo quien se encarga de la Dirección del proyecto, Nicolás Alvear que es el encargado del Desarrollo Técnico y Desarrollo de Productos,     y      Benjamín Pizarro      quien es Médico y aporta desde la parte conceptual médica e investigación.

Este equipo, actualmente se encuentra trabajando en modelos de detección de patologías en imágenes de rayos X, donde han detectado que este desarrollo debe ir como un sistema de priorización, específicamente, en el sector público, para detectar distintas patologías con inteligencia artificial.

¿Cómo ha evolucionado el proyecto? 

Ha sido un proceso largo y la clave está en el trabajo que hacemos como equipo y, por otro, la articulación con los agentes del medio, para nosotros postular el proyecto a fondos de Chrysalis, de la Dirección de Innovación y Emprendimiento, fue súper importante, para empezar a validar y formarnos para adquirir las capacidades necesarias para llevar adelante un emprendimiento. Este apoyo, tanto económico como en formación ha sido clave, porque nos ha ayudado a detectar detalles que mejorar, antes de que signifiquen un problema para el proyecto.

Nosotros buscamos que esto se pueda hacer barato, pivotear rápido y hacer todo para obtener un valor verdadero para los clientes. Venimos saliendo de un proceso de 60 entrevistas con el Centro de Innovación de la U. Católica de Chile y el cómo ha cambiado el proyecto es tremendo, estos programas impactan mucho en cómo uno enfrenta el problema y termina desarrollando el emprendimiento finalmente.

¿Cuál es el valor que le otorga la participación que han tenido en los Concursos DIE?

Los fondos CREA y DESARROLLA, tienen la particularidad de que son entregados en etapas, lo que      permite darle continuidad al trabajo que estás haciendo, vincularse con todos los agentes PUCV y adquirir muchas herramientas. Este sistema nos permite disminuir los riesgos, porque te entregan dinero que va en directo desarrollo del proyecto y te da tiempo, tiempo para buscar al equipo, aprender lo que necesario y pedir ayuda entre los mismos emprendedores o a las personas de la DIE, a quienes nosotros sabemos que les podemos escribir y van a contestar y estar ahí o te van a dar una propuesta de algo que hacer, lo que es muy valioso. 

¿Qué esperan alcanzar al finalizar este proceso de los Concursos DIE? 

El espíritu de este proyecto es llevarlo a la atención pública y, hoy, gracias a los procesos de entrevista y validaciones estamos contentos de que esto nos lleva nuevamente hacia allá, hacia los CESFAM, los Servicios de Alta Resolutividad, porque pensamos que ahí es donde un mayor impacto puede tener. Nuestro deseo es poder construir herramientas que le permitan a los profesionales de la salud hacer su trabajo más rápido y mejor, de forma que sea posible entregar mejores resultados a los pacientes.