PROVERBIOS JAPONESES
- Si un problema tiene solución ¿para qué preocuparse?y si no lo tiene, ¿para qué preocuparse?
- Si lo piensas, decídelo. Si lo decidiste, no lo pienses.
- No retengas a quien se va, ni rechaces a quien llega.
- Es mejor ser el enemigo de una buena persona que el amigo de una mala.
- Rápido significa: lento pero sin pausa…
- Si no existiera la gente común tampoco existirían las personas extraordinarias.
- El que quiere subir inventa la escalera.
- El marido y la mujer deben ser como las manos y los ojos: cuando duele la mano, los ojos lloran, y cuando los ojos lloran las manos secan las lágrimas.
- El sol no sabe de bueno ni de malos. El sol ilumina y calienta a todos por igual. Quien se encuentra a sí mismo es como el sol…
- Hasta el viaje más largo comienza con un solo paso.
- Quien bebe no sabe lo peligroso del vino, quien no lo bebe no sabe de lo bueno que hay en él.
- Aunque se necesite la espada una sola vez en la vida, es necesario llevarla consigo siempre.
- Las flores bonitas no dan buenos frutos.
- La tristeza es como un vestido rasgado: hay que dejarlo en casa.
- Cuando hay amor hasta las cicatrices de la viruela son iguales a los hoyuelos en las mejillas.
- Nadie tropieza mientras está acostado en la cama.
- Una palabra bondadosa puede calentar tres meses de invierno.
- En el camino deja que los tontos y los locos pasen primero.
- Verifica siete veces antes de cuestionar a una persona.
- Haz todo lo que puedas, lo demás déjaselo al destino.
- Al dibujar una rama es necesario escuchar el soplo del viento.
- La honestidad excesiva raya en la estupidez.
- A veces la hoja se hunde pero la piedra flota.
- La victoria pertenece a aquel que espera media hora más que su oponente.
- La felicidad viene a la casa donde se ríen.
- No se disparan flechas a una cara sonriente.
- Es posible soportar el arroz y el té fríos, pero la mirada y las palabras frías son insoportables.
- A los diez años es una maravilla, a los veinte es un genio, y a los treinta una persona común.
- Si preguntas sentirás vergüenza un minuto, si no lo haces sentirás vergüenza toda la vida.
- La mujer puede atravesar la roca si se lo propone.
- Un jarrón perfecto nunca ha salido de las manos de un mal artesano.
- No tengas miedo de una pequeña curva para enderezar una recta.
- La pobreza hace a los ladrones como el amor a los poetas.
- Si iniciaste el camino por voluntad propia mil ri parecen uno solo. (El ri es una unidad de medida de longitud japonesa)
- Los ríos profundos fluyen lentamente.
- Al clavo salido le toca siempre el martillazo.
- Con la primera copa, el hombre bebe vino; con la segunda, el vino bebe vino, y con la tercera, el vino bebe al hombre.
- Con leña prometida no se calienta la casa.
- Cuando un hombre pobre come pollo, o él o el pollo están enfermos.
- Encontrarse es el comienzo de la separación.
- El pescado que se escapa siempre parece el más grande.
- El tiempoque pasa uno riendo es tiempo que pasa con los dioses.
- Es de los enemigos, no de los amigos, que las ciudades aprendan la lección de construir murallas altas
- Estudiando lo pasado, se aprende lo nuevo.
- Incluso los monosse caen de los árboles.
- La lluvia solo es un problema si no te quieres mojar.
- La nieve no rompe las ramas del sauce»
- La rana en el fondo del charco no sabe nada del gran Océano.
- Las grandes obras de las instituciones las sueñan los santos locos, las realizan los luchadores natos, las aprovechan los felices cuerdos y las critican los inútiles crónicos
- Los que se aferran a la vida mueren, los que desafían a la muerte sobreviven.
- Los ladrones tendrán tiempo para descansar; los vigilantes jamás.
- Ni tan lento que la muerte te alcance, ni tan rápido que des alcance a la muerte.
- No digas: es imposible. Di: no lo he hecho todavía.
- No hay peligro para el preparado.
- Piedra que rueda, no hace montón.
- Trata que tus palabras sean mejor que el silencio.
- ¿Por qué se preocupan por su peinado cuando les van a cortar la cabeza?
- Se aprende poco con la victoria, en cambio mucho con la derrota.
- Si vas a creer todo lo que lees, mejor no leas.
- Si nadie habita una casa, ésta pronto se caerá.
- Solo en la actividad desearás vivir cien años.
- Tarde o temprano la disciplina vencerá a la inteligencia.
- Un barco que tiene cien marinos, puede subir una montaña.