Finalización del Proyecto de Vinculación con el Medio con la Escuela de Alimentos refuerza el compromiso con la formación de voluntarios del Comedor Solidario 421
Con mucha alegría se realizó la ceremonia de cierre del Proyecto de Vinculación con el Medio: "Formación en Manipulación de Alimentos y Buenas Prácticas de Manufactura para voluntarios del comedor solidario 421 de acuerdo a la normativa vigente", iniciativa en conjunto con la Escuela de Alimentos y la Pastoral PUCV durante este 2025, en donde se capacitaron 16 voluntarios del comedor solidario de la Iglesia La Matriz.
Esta iniciativa consideró instancias teóricas presenciales y actividades prácticas, permitiendo a las y los voluntarios adquirir y aplicar conocimientos fundamentales en materias clave como higiene personal, control de temperaturas, prevención de la contaminación cruzada, almacenamiento seguro de alimentos y cumplimiento de normativas sanitarias básicas. De esta manera, la capacitación no solo reforzó habilidades técnicas, sino que también promovió prácticas responsables orientadas a la protección de la salud de los comensales.
Este proyecto se enmarca en las acciones pastorales y en los valores que promueve la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, expresados en un compromiso concreto con la dignidad humana, la solidaridad y la vinculación con el medio. A través de esta iniciativa, la Universidad reafirma su vocación de servicio y su rol activo en la construcción de una sociedad más justa y fraterna. Asimismo, se reconoció profundamente la labor que realizan las y los voluntarios del Comedor Solidario 421, quienes viven su servicio desde la fe, el respeto y una dedicación constante hacia quienes más lo necesitan. Su compromiso diario es un testimonio concreto de amor al prójimo y de trabajo comunitario en favor del bien común.
Esther Zamora, coordinadora general y voluntaria del comedor solidario 421 menciona con alegría en esta ceremonia: "Gracias por creer en nuestro trabajo, por caminar junto a nosotros y por ayudarnos a seguir construyendo, desde el Barrio Puerto de Valparaíso, una comunidad más fraterna y solidaria".
De igual forma, se destacó el aporte disciplinar y humano de la Escuela de Alimentos, cuya comunidad académica ha dispuesto su conocimiento y experiencia al servicio de esta iniciativa. Este trabajo colaborativo con la Pastoral refleja la trayectoria de responsabilidad social de la Escuela y su coherencia con una formación profesional comprometida con las necesidades reales del entorno, fortaleciendo la articulación entre academia, pastoral y comunidad, generando un impacto positivo y sostenible en el territorio, y aportando al desarrollo de prácticas solidarias que promueven la salud, la dignidad y el cuidado de las personas.