Participantes del Ciclo del Emprendedor de Gen-E fueron apoyados por estudiantes de la Escuela de Comercio PUCV
La instancia se dio en el marco de la asignatura “Teoría de la Organización 1” dictada por la académica Loreto Morales.
17.08.2022
Desde sus inicios el programa Ciclo del Emprendedor de la Incubadora Social Gen-E, perteneciente a la Dirección de Innovación y Emprendimiento de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, ha buscado potenciar microemprendimientos de la Región, por medio del desarrollo de conocimientos asociados a la gestión de sus proyectos, modelo de negocios y a fortalecer las competencias actitudinales entre sus participantes.
Todo lo anterior, se realiza mediante un proceso formativo integral y cercano para emprendedores y emprendedoras. Es por esto, que también es necesaria la vinculación con la academia y, en esta oportunidad, un grupo de participantes del Ciclo del Emprendedor, fueron apoyados por las y los estudiantes del curso “Teoría de la Organización 1” de la Escuela de Comercio, donde por medio de la profesora a cargo, Loreto Morales y la metodología de Aprendizaje y Servicio tuvieron la oportunidad de conocer y apoyar en temas contables.
Según la encargada de microemprendimiento de Gen-E, Manola Bozzo: “La vinculación de emprendedores con académicos de la PUCV es muy valiosa y bastante solicitada. En general los emprendedores buscan apoyo y aprendizaje en temas específicos que las diversas Unidades Académicas pueden brindar de manera profesional, y se complementan con los contenidos y herramientas que entregamos en el Ciclo del Emprendedor”. Esta vinculación con Unidades Académicas PUCV, tienden a ser sobre temáticas legales, contables, manejo de alimentos, diseño, comunicación, soluciones informáticas, entre otras. Las que son impartidas en modalidad de aprendizaje y servicios, pasantías y talleres.
Por su parte, la académica Loreto Morales, comentó como surge este espacio de colaboración y señaló: “Creemos necesario generar metodologías que vinculen a estudiantes con su territorio, para que así comiencen durante su formación a reconocer el bien que cuida su profesión al realizar trabajo práctico y real”.
Al mismo tiempo, rescata la bidireccionalidad del conocimiento que surge en estas instancias, donde los estudiantes valoran aplicar los aprendizajes teóricos y encuentran sentido a lo que están aprendiendo. “El vincularse con emprendedores que han logrado llevar adelante proyectos con esfuerzo, motiva a los estudiantes y les da la responsabilidad de responder de mejor manera, que si solo fuera una evaluación tradicional. Por su parte, los emprendedores valoran el vínculo con los jóvenes, ya que se sienten escuchados, reciben apoyo técnico y entregan experiencia a los estudiantes” agregó Morales.