Investigadoras PUCV generan aportes trasformadores para mejorar la calidad de vida de las personas (parte 1)
Nueve investigadoras destacadas de la Universidad, comentaron cómo sus trabajos de investigación aplicada, han impactado en la calidad de vida de las personas. En esta primera parte, mostraremos parte del trabajo de las destacadas investigadoras María Elvira Zúñiga, Vanessa Vega y Vitalia Henríquez.
26.04.21
Los extraordinarios aportes de las investigadoras PUCV en el ámbito de la investigación aplicada, han permitido que el conocimiento generado al interior de la Universidad, transite hacia el desarrollo de soluciones efectivas a las diversas problemáticas que afectan a la sociedad y el medio ambiente. En este proceso, y luego de una gran trayectoria, la investigación ha crecido significativamente madurando hacia nuevos estados de desarrollo que se han plasmados en productos que responden a diversas necesidades y que impactan positivamente en la calidad de vida de las personas.
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La académica de la Escuela de Ingeniería Bioquímica (EIB) y Directora del Centro Regional de Estudios en Alimentos Saludables (CREAS), ha apoyado a una gran cantidad de emprendedores y empresas de alimentos, desarrollando prototipos y soluciones tecnológicas y contribuyendo a la transferencia tecnológica desde las universidades al sector productivo. Sus líneas de investigación se centran en la aplicación y utilización industrial de enzimas, la producción, extracción y utilización de bioactivos, y la revalorización de los residuos agroindustriales.
Sobre ellas, explicó: “Mis áreas de interés son principalmente los procesos para obtener productos bioactivos, nutracéuticos y alimentos funcionales, siempre con un énfasis en su carácter innovador”.
Además, en cuanto a la aplicación y utilización de enzimas, se puede mencionar el desarrollo de una tecnología que transforma el azúcar en fibra soluble con propiedades prebióticas (que promueven los probióticos). Esta tecnología es materia de un contrato de licenciamiento. En este sentido, es importante indicar que poso 60 publicaciones indexadas (ISI y/o WoS), 10 capítulos de libros, dos solicitudes de patente, y cerca de 200 presentaciones en congresos, simposios y/o conferencias.
Consultada sobre el impacto en la sociedad y/o medioambiente, la investigadora de EIB y CREAS detalló: “La línea de investigación de valorización de residuos de la industria alimentaria es muy motivante, pues busca contribuir con el desarrollo sostenible de la industria alimentaria, considerando el cuidado del medio ambiente y la reducción del material orgánico que se elimina en sus procesos. En el sector, las fracciones que se descartan –como las cáscaras o semillas– poseen una buena cantidad de compuestos bioactivos, componentes que son favorables a la salud, como por ejemplo antioxidantes, ácidos grasos esenciales, péptidos bioactivos o fibra soluble, por nombrar algunos pocos”.
“El desarrollo de esta línea consiste en mi caso en transformar estas materias primas mediante un proceso amigable con el medio ambiente para obtener ingredientes o suplementos alimenticios, nutracéuticos como concentrados de origen natural con potenciales propiedades para reducir fármacos. Es así como he obtenido péptidos con potenciales propiedades antihipertensivas y que reprimen el crecimiento de tumores malignos, así como también ingredientes que permiten formular alimentos innovadores y más saludables. Un aspecto relevante para estos compuestos bioactivos es estudiar como su actividad biológica se mantiene durante su producción, formulación, el almacenamiento e ingesta”, agregó.
“Mi interés en la investigación aplicada está muy relacionada al modelo de gestión del Centro Regional de Estudios en Alimentos Saludables, CREAS, una plataforma científica tecnológica que busca contribuir al sector público y privado con el desarrollo de alimentos innovadores saludable y competitivos. Con este centro, hemos apoyado a una gran cantidad de emprendedores y empresas de alimentos a desarrollar prototipos o soluciones tecnológicas, contribuyendo a la transferencia tecnológica desde las universidades al sector productivo”, concluyó.
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En este ámbito, la investigadora de la Escuela de Pedagogía de la Universidad, Dra. Vanessa Vega Córdoba, ha desarrollado una línea de investigación consolidada en ‘Discapacidad intelectual, accesibilidad e inclusión’. Al respecto, su trabajo ha contribuido, por una parte, a diseñar apoyos tecnológicos que permiten potenciar la vida independiente de quienes tienen discapacidad intelectual y, por otra, mejorar aspectos vinculados con la accesibilidad cognitiva, con el objetivo de garantizar una verdadera accesibilidad universal en espacios y servicios públicos.
“Este trabajo interdisciplinario lo hemos realizado junto a profesores del Núcleo en accesibilidad e inclusión PUCV’ y ha sido co diseñado por un grupo asesor de personas con discapacidad intelectual que trabaja con nosotros desde hace 4 años. Entre los productos que hemos desarrollado está el "Modelo de evaluación en Accesibilidad Cognitiva" que busca asegurar la participación en igualdad de condiciones, de las personas con discapacidad, promueve la urgencia de que la accesibilidad cognitiva se transforme en una característica presente en los organismos públicos y privados del país”, comentó.
“Asimismo, desarrollamos el "Pictogramas PICTOS” que es un sistema de ilustración pictográfica para la accesibilidad cognitiva, diseñado como apoyo visual en accesibilidad cognitiva. Esto junto con ofrecer apoyo visual, potencia la vida independiente de la a en personas con discapacidad intelectual en el uso de servicios públicos”, agregó la Dra. Vanessa Vega.
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La investigadora del Instituto de Biología PUCV, Dra. Vitalia Henríquez Quezada, ha desarrollado una línea de investigación enfocada en el creciente interés que se ha venido observado en la última década por la biotecnología de microalgas. Al respecto, indicó: “Considerando que las microalgas son hospederos de bajo costo para la síntesis de proteínas recombinantes y compuestos bioactivos, estamos investigando con el propósito de explotar las ventajas de las microalgas para diferentes aplicaciones biotecnológicas”.
“De esta manera, nuestro trabajo de investigación se enfoca principalmente en la ingeniería genética y metabólica de microalgas marinas y de agua dulce. Por ello, hemos desarrollado herramientas genéticas para expresar proteínas recombinantes en el cloroplasto de Haematococcus pluvialis y Tetraselmis suecica. Además, hemos incursionado en ingeniería metabólica cloroplastídica en Haematococcus pluvialis para alterar positivamente la acumulación del antioxidante astaxantina, y recientemente, en Nannochloropsis gaditana a nivel nuclear para aumentar los niveles nutricionalmente importantes de ácidos grasos omega-3”, afirmó.
“Por último, debido al impacto del cambio climático sobre la agricultura, se hace necesario desarrollar nuevas estrategias para aminorar el daño que se produce a los cultivos, por tanto, nos estamos encaminando a la utilización de microalgas con propiedades específicas para explotarlas como bioestimulantes”, concluyó.
Es importante destacar que la línea de investigación desarrollada por la Dra. Henríquez, han recibido reconocimiento y patrocinio a través de proyectos con financiamiento Fondecyt, Corfo y Fondef IDeAS.
Por Marcelo Vásquez, periodista VRIEA PUCV / marcelo.vasquez@pucv.cl