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Vertientes del Folklore de Chile

A fines del siglo XIX, mientras en Europa se sucedían las transformaciones sociales y culturales, en Chile el término de la Guerra del Pacífico y el comienzo del auge del salitre, generaban nuevas condiciones económicas, políticas y sociales que propiciaban la realización de fiestas, recepciones, tertulias y veladas en los salones familiares y espacios públicos. Las actividades familiares más importantes eran las tertulias y saraos, que tuvieron gran popularidad en ciudades como Santiago, Valparaíso, La Serena y Copiapó.

En este contexto las danzas que tuvieron vigencia en los salones de la aristocracia y de la clase media eran principalmente de origen europeo. Las contradanzas, la zamacueca, la polka, la habanera y el vals convivieron sin problemas y fueron cayendo en desuso lentamente. A comienzos del 1900 se incorporaron las danzas norteamericanas marcando un giro en el estilo, algunas de éstas fueron el vals Boston, el one step, el fox trot y el shimmy. Tambien tuvo un sitio especial el tango llegado desde Argentina.

El puerto era muy próspero y servía de puerta de entrada a todo espectáculo artístico internacional. el primer Teatro Municipal de Valparaíso fue el Teatro Victoria , obra de los empresarios Pablo del Río y Pedro Alessandri, quienes firmaron un contrato con la Municipalidad de Valparaíso el 20 de junio de 1843, le siguieron a éste el Teatro Odeón y el Teatro Circo Nacional. Mario Cánepa comenta en su libro La ópera en Chile que esta era la ciudad chilena más aficionada al Bell Canto, tanto así que "se salvaban las empresas de la bancarrota" cuando no habían tenido buenas temporadas en el resto de América. La primera compañía lírica que vino a Chile estaba de paso en su camino a Lima e hizo una escala en el puerto de Valparaíso, como no había teatros que dieran escenario a este tipo de espectáculos, se eligió la casa de los señores José y Manuel Cifuentes que contaba con un salón de baile de "...50 varas por 25 de ancho...".

Tertulia musical anónima

La actividad artística en Valparaíso fue bastante intensa y las estudiantinas llegaron a ser muy populares; además continuamente llegaban al puerto, desde el extranjero, muchos espectáculos de ópera y zarzuela; las compañías de teatro, compañías líricas, cantantes extranjeros, además de espectáculos curiosos y grandes primicias llegaban de paso en su camino a Lima o a galas especialmente organizadas. Roberto Hernández, en su libro Los primeros teatros de Valparaíso, reproduce el aviso público de invitación a esta gala lírica: "Teatro en la calle San Juan de Dios Nº8, en la casa de los señores Cifuentes. Habiendo llegado a ésta la Compañía Lírica que se va para Lima, compuesta de las señoras Teresa Scheroni, Margarita Caravaglia, y de los señores Domingo Pezzoni y Joaquín Bettali, se proponen dar algunas representaciones en esta ciudad, antes de partir a su destino. La primera será la ópera semi-bufa El engaño feliz o el traidor descubierto, música del célebre maestro Rossini".

Consecuentemente con la vida cultural que se desarrolló en Valparaíso a fines del siglo XIX, nacieron los Conservatorios de Música y los almacenes de instrumentos musicales y partituras. Valparaíso fue la ciudad que tuvo mayor número de editoriales y casas de música de Chile debido a su actividad artística ampliamente difundida.

Vertiente Aborigen

La vertiente aborigen aglutina principalmente a Aymaras, Atacameños o Licanantai y Diaguitas en el Norte, Mapuche en el Centro y Sur, Rapa Nui en Isla de Pascua y hasta 1920 aproximadamente a minorías étnicas de tierra del Fuego, conformadas por Shaswashqar, Yamanas, Selknam, Aoníkenk y Haush, agonizantes a principíos de siglo y hoy extintas.

Los Mapuche en el sur de Chile y Argentina, vuelcan en su música y danzas hondo contenido simbólico, mágico religioso, en ritos de iniciación, de reafirmación de poderes de curación y rogativas, presididas e íntimamente ligadas a la Machí,con poderes espirituales superiores e intermediaria entre los hombres y Gnenechen.

Las expresiones culturales de Rapa Nui o Isla de Pascua, ubicada en medio del océano Pacífico a 2.090 millas del puerto de Valparaíso pertenecen a una raíz polinésica. De su antiguo repertorio coreográfico quedan escasos vestigios pero se sabe por las investigaciones del doctor Ramón Cambell que sus danzas estuvieron ligadas a ritos de iniciación y fertilidad. En trabajos de campo, Margot Loyola ha pesquisado datos de danza guerrera en bloques, descriptivas y en homenaje a nobles; de forma circular y gestuales colectivas. Todas acompañadas de accesorios simbólicos.

En el Norte de Chile, la música y danza aymara y atacameña están insertas en el ciclo agropastoril, en ceremonias que rinden culto al agua (Talatur) Floreamiento o marcación del ganado, Pachallampe, convido de la semilla, (siembra de papas y granos respectivamente), en carnavales fiesta en homenaje a la Pachamama y en celebraciones de los Santos Patronos de cada pueblo.

Vertiente africana

Aunque en Chile la herencia africana no está presente en el grado de otros países latinoamericanos no se puede negar su influencia. Chile es un país mestizo y dentro de su mestizaje encontramos al africano presente en muchas expresiones culturales, por ejemplo, según los investigadores la cueca tiene indudables rasgos africanos en su conformación y éste no es un acontecimiento aislado ni mucho menos fortuito.

Si bien en 1811 en nuestro país se prohibió la esclavitud gracias a la ley de "Libertad de Vientres" dictada por don Manuel de Salas, siete años después aún se podía leer la siguiente gacetilla en un periódico metropolitano: "Se vende un mulato de 22 a 24 años de buenas costumbres y en precio cómodo; el que lo quiera comprar véase con don Felipe Santiago del Solar".

Cuando el Ejército Libertador llegó a Chile en 1817, dos batallones (7° y 8°) estaban compuestos en su totalidad por negros africanos y criollos reclutados por San Martín en la Argentina y con el inicio de la República, la población africana comenzó a diluirse en el mestizaje. Gracias a la abolición completa de la esclavitud dictada en 1823, Chile pasó a ser la segunda nación en el mundo, después de Dinamarca, en tomar esta resolución. De esta manera, la minoría africana, que habitaba principalmente las ciudades de Santiago, Quillota y Valparaíso, comenzó a mezclarse con indios, gitanos y europeos, aportando parte de su herencia en la conformación étnica y cultural de nuestro pueblo.

En 1871, los negros puros representaban el 58% de la población ariqueña. Más los mulatos y zambos de la zona, Arica era una ciudad eminentemente afrodescendiente. Arica fue una de las principales ciudades en recibir población negra y siempre fue numerosa:

Esta abundante población negra se dispersó en 1929, cuando Arica pasó a formar parte definitivamente de Chile y la mayoría de la población afrodescendiente emigró a Perú. Con el paso del tiempo chilenos, blancos, indios, europeos y negros conformaron el actual mestizaje de la ciudad. Sin embargo, en Azapa existe actualmente un importante número de afrodescendientes. Algunos de los apellidos del valle que aún conservan el estigma africano son Ríos, Corvacho, Báez, Llerena, Cadenas, Baluarte, Barrios y Zavala.

Dentro de las fiestas religiosas del Norte de Chile, Sur de Perú y Bolivia se comparte muchas danzas que sin duda tienen parte de sus raíces afroamericanas como los Zambos caporales y los Morenos.

Vertiene Europea

Destacan también las estudiantinas; el Canto a lo Divino tradicional de la zona central; los villancicos y tonadas al Niño Dios, las danzas festivas que se folklorizaron en nuestro país como las variantes de cueca, la jota, la seguidilla, la habanera, la polka, la mazuka y otros. Demás está nombrar instrumentos como el arpa, la guitarra o el piano y expresiones de la poesía popular como las, las coplas y los romances.

Todas estas expresiones tienen su centro en regiones campesinas desde la región de Valparaíso a la región y están configurados con elementos aborígenes y europeos.

En los salones de la aristocracia y de la clase media (estos últimos llamados "salones de medio pelo") las danzas que tuvieron mayor exito fueron aquellas principalmente de origen europeo: las contradanzas, la zamacueca, la polka, la habanera y el vals convivieron sin problemas hasta que fueron cayendo en desuso lentamente.

A comienzos del siglo pasado, se incorporaron las danzas norteamericanas marcando un giro en el estilo, algunas de éstas fueron el vals boston, el one step, el foxtrot y el shimmy. Especial sitio tuvieron la música chilena y el tango llegado desde Argentina.