Estudiante de doctorado PUCV trabaja en el desarrollo de líneas celulares productoras de biofármacos
El proyecto realizado por la candidata a Doctor en Biotecnología, Yesenia Latorre, se encuentra en el marco de su tesis que recientemente se adjudicó el Concurso VIU de Conicyt.
La ingeniera Civil Bioquímica, que actualmente se encuentra cursando el Doctorado en Biotecnología de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Yesenia Latorre, realiza su tesis doctoral sobre la optimización en la producción de biofármacos. Para ello ha realizado modificaciones genéticas en la línea celular de tal manera de incrementar la productividad, con la cual se adjudicó hace unos meses la segunda etapa del Concurso Valorización de la Investigación en la Universidad de Conicyt, donde podrá optar hasta 24 millones para desarrollar esta fase de su investigación.
Es por esto, que en el marco de este proyecto Latorre nos contó su experiencia de cómo ha sido su comienzo como investigadora PUCV.
¿De qué trata el proyecto que actualmente están desarrollando?
El proyecto VIU está en el marco de mi tesis doctoral, la que estoy realizando con la Doctora Claudia Altamirano, donde tenemos líneas celulares que construí en Alemania en 2016. Éstas tienen como particularidad que, dentro del genoma, hay una zona de reconocimiento homologa, lo que hace que cuando inserto un nuevo vector de expresión, cambia la secuencia que tenía anteriormente, por una nueva. Esto hace que tengamos líneas celulares mucho más rápido de lo que se demora actualmente. Es decir, lo que actualmente toma cerca de un año o un año y medio, nosotros lo podemos obtener en tres o cuatro meses.
Dicho de otra forma, nosotras queremos crear 5 diferentes tipos de líneas celulares que generen 5 biofármacos de interés nacional, como, por ejemplo, anticuerpos con propiedades anticancerígenas, proteínas para el tratamiento de distintas enfermedades, entre otros. Actualmente estamos produciendo eritropoyetina que es para el tratamiento de anemia severa, además de ser utilizado en pacientes con problemas renales.
Queremos generar anticuerpos y proteínas que sean de interés nacional y, que ojalá sean aplicables a la salud pública, por lo tanto, estamos seleccionando las mejores opciones y biofármacos que no puede comprar el Ministerio de Salud, para así poder hacerlo más económico y generar accesibilidad del gobierno a la obtención de estos biofármacos.
¿Quiénes forman parte de tu equipo?
Por el momento estamos solo nosotras con la Doctora Claudia Altamirano, sin embargo, pronto vamos a incluir a Camila Aros que es Ingeniera en Bioprocesos y tiene bastante experiencia en el cultivo en bioreactores y, posteriormente, para desarrollar la modificación de líneas celulares tenemos algunos candidatos a doctores que nos van a apoyar en el área más molecular.
¿Qué esperas de tu proyecto en unos años más?
Me gustaría en un futuro extender nuestras líneas celulares, con el compromiso de que los precios sean menores a los que están en el mercado para el Ministerio de Salud.
Sin embargo, esta es una idea a largo plazo, ya que en el VIU queremos llegar a obtener las líneas celulares y ojalá un comprador potencial de éstas. También nos gustaría obtener otro sistema de financiamiento al terminar el VIU, con el fin de seguir con el proyecto, puesto que, si bien vamos a tener líneas celulares que van a producir biofármacos, éstos tienen que ser probados a nivel animal, hacer pruebas de eficiencia, entre otras cosas, entonces es un proceso bastante largo.
¿Cómo fue el proceso de postulación del Concurso VIU?
Todo comenzó cuando el año pasado me adjudiqué el concurso de la Dirección de Innovación y Emprendimiento PUCV, desde ese momento nació la idea de postular a la primera etapa del VIU y ahora estamos muy felices de adjudicarnos la segunda fase, donde podemos acceder a más financiamiento.
Respecto a la postulación, la logramos hacer en base a lo que habíamos puesto en el Concurso DIE, modificando ciertos aspectos que eran más específicos.
¿Crees que el Concurso DIE sirvió para postular al VIU?
Absolutamente, porque más allá del tema del papel es la seguridad de que tu proyecto realmente le importa a la Universidad y es muy posible que también fuentes de financiamiento gubernamentales. Por lo que estoy muy segura de que los DIE te dan el piso de decir que este proyecto puede más.
¿Qué destacas de la primera etapa del VIU?
En la primera etapa tuvimos que validarnos comercialmente, dado a mi formación, ya que soy ingeniera civil bioquímica, algunos conceptos me resultaban muy familiares, tales como, el plan de negocios y plan de trabajo. Sin embargo, considero que fue más difícil el elegir la consultora, porque nuestro tema es muy específico, entonces necesitábamos una consultora que supiera de biotecnología y biofármacos.
El plan de negocios que te pide esta primera etapa, me hizo aterrizar todo lo que estaba haciendo en algo que verdaderamente será útil para los demás. Esto permitió que tomara mi investigación y le diera un sentido más allá de lo económico, del negocio y logré darme cuenta de que se puede hacer algo con la investigación, en mi caso, ayudar a las personas haciendo medicamentos más accesibles para quienes hoy en día se están atendiendo por el sistema público.
¿En qué se encuentra actualmente el proyecto?
Luego de la adjudicación de la etapa dos, comenzamos a ejecutarla en mayo de 2019, porque hay mucho trabajo de escritorio que hacer antes de comenzar la investigación en sí, debemos elegir las proteínas, ver cuáles son las que están en el mercado o que no tienen para cubrir dentro del gobierno.
¿Cómo imaginas tu futuro como investigadora?
Me gustaría seguir con el tema, ya que sería una gran ayuda porque en Chile no hay producción de biofármacos, todo se tiene que importar. Mi idea principal es abrir la ventana a que una empresa se interese en sintetizar biofármacos en suelo nacional.
También, me gustaría hacer un postdoctorado en el mismo tema, pero más vinculado a lo que es el desarrollo de nuevas drogas para nuevos tratamientos, y así poder sintetizarlos usando nuestras líneas celulares que ya sabemos que son bastante estables y que nos han ayudado mucho en el aumento de producción.
Creo que el desarrollo de nuevas drogas, de nuevos anticuerpos para tratamientos de diferentes tipos de cánceres, también es bastante importante, más ahora que los niveles de cáncer a nivel mundial han estado en aumento.
¿Cómo has sentido el apoyo de la Universidad en todo este proceso?
Por parte de la Vicerrectoría de Investigación y Estudios Avanzados, me he sentido apoyada, ya que por la Dirección de Innovación y Emprendimiento me adjudiqué el DIE y tuve ayuda en la postulación al VIU, mientras que, por la Dirección de Estudios Avanzados, tuve la posibilidad de acceder a la beca interna de término de tesis, lo que permitirá que tenga dedicación exclusiva al desarrollo del VIU que está vinculado a ésta.