Ayer lunes 23 de junio se llevó a cabo la 3ª Feria de Prototipos del ramo Taller de Química Industrial II, instancia en la que estudiantes de cuarto año de la carrera de Química Industrial de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso presentaron sus propuestas de innovación tecnológica. La actividad se realizó en el Patio de las Camelias de la Facultad de Ciencias y contó con la participación de académicos, estudiantes y representantes del sector productivo, consolidando un valioso espacio de vinculación entre la docencia y el entorno profesional.

La Feria permitió visibilizar el trabajo colaborativo y aplicado de los distintos grupos, quienes, a lo largo del semestre, desarrollaron soluciones tecnológicas frente a problemas reales del ámbito industrial. Cada equipo expuso su prototipo, detallando tanto el proceso técnico como las proyecciones de su propuesta.

Antidust Polimer, conformado por Gesenia Bravo, Paulina Saveeedra e Ignacio Estevill, abordó la necesidad de evitar la adhesión de polvo en sensores ópticos. Su propuesta consistió en una película polimérica transparente, biodegradable y de origen no petroquímico, desarrollada mediante polimerización en masa y solvent casting. El material sintetizado demostró propiedades superiores de antiadherencia e inocuidad.

Quick, el proyecto de Macarena Cornejo, Alondra Hidalgo y Natalia Rojo, presentó un kit portátil para la identificación de tipos de cobre en terreno, útil para faenas mineras. El equipo trabajó con una empresa de minería en Catemu y colaboró con el departamento Maker Space para el diseño y fabricación de la caja del kit en impresora 3D. La solución incluye reactivos, materiales de protección y un manual de uso.

El grupo Electro-Wine, integrado por Juan Gallardo, Felipe Picero y Miguel Gutiérrez, propuso una solución al problema de la concentración de sales en vinos, producto de la escasez hídrica. A partir de una problemática planteada por Viña Casas del Bosque, diseñaron una celda de electrodiálisis que permite refinar el vino blanco sin alterar sus propiedades organolépticas.

Por su parte, Keraluxe, de Bran Vargas, Ricardo Rubillanca y Martina Muñoz, enfocó su innovación en la valorización de residuos de la industria porcina, en particular pelo y piel de cerdo. A través de una extracción hidrotérmica, lograron obtener proteínas aplicables en el sector cosmético y médico, con miras a desarrollar productos como harina proteica o cicatrizantes tópicos.

Finalmente, MoliDet, el prototipo presentado por Ignacio Belgara y Sofía Torres, consistió en un kit portátil de detección cualitativa de molibdeno, orientado a faenas mineras de menor escala. Mediante la formación de un complejo coloreado y con procedimientos simples y de bajo costo, el equipo buscó facilitar el acceso a esta tecnología en sectores con menor capacidad de análisis técnico.

La actividad contó con la asistencia de profesores del Instituto de Química, estudiantes de distintas carreras y campus, además de la presencia de Santiago Prat, gerente de innovación del Centro de Astrofísica y Tecnologías Afines (CATA), y Fabián Ramírez, representante de Key Process, ésta última, empresa especializada en valorización de relaves mineros.

La vinculación temprana con el entorno productivo, junto con la aplicación práctica del conocimiento disciplinar, fueron los pilares de esta tercera edición de la Feria de Prototipos donde los profesionales en formación fueron capaces de responder a desafíos reales desde una perspectiva científica, tecnológica y sostenible.