Estudiantes de Propedéutico trabajan en laboratorios PUCV
La Escuela de Ingeniería Química y Escuela de Ingeniería Bioquímica desarrollaron novedosos talleres, en sus respectivos laboratorios, para estudiantes del Propedéutico PUCV.
Así, los y las estudiantes del Programa participaron activamente de estos talleres, donde pudieron experimentar la ciencia de manera entretenida y dinámica, acorde al Modelo Educativo PUCV que establece que el centro y el motor del proceso formativo está constituido por la relación entre los profesores y los estudiantes.
“Agradecemos la colaboración de las unidades académicas de Ingeniería Bioquímica e Ingeniería Química por permitir que los y las estudiantes se acerquen de forma significativa y participativa a cada una de las particularidades de estas carreras. Esto permite que ellos y ellas puedan tomar una decisión sobre todo informada de la carrera de su interés", expresó una de las coordinadoras del Programa, Maureen Palma.
El estudiantado disfrutó de una experiencia práctica en los laboratorios de ambas ingenierías, participando en actividades vivenciales. En ingeniería Química el taller se denominó ‘¿Qué puedo hacer para reducir la contaminación en Chile?’, y en tanto la pasantía de Ingeniería Bioquímica se llamó ‘Un Vistazo a la Ingeniería Bioquímica’, la cual incluyó una introducción a esta disciplina en rápida evolución, desde la biotecnología hasta la sostenibilidad.
“En la actividad presencial pudimos debatir y conversar. Les mostré cómo conocer en tiempo real la calidad del aire en Chile y cómo interpretar los resultados. Además, se debatió cómo la ingeniería química puede reducir los problemas de contaminación mediante el uso de tecnologías de control, y les enseñé cómo usar la herramienta Hysplit, que es un recurso online. Valoro que las y los estudiantes que asistan a cada una de las sesiones y que tengan información del abanico de carreras de ingeniería de la PUCV”, expresó el Jefe de Vinculación con el Medio de Ingeniería Química, Ernesto Pino.
"Estamos emocionados de colaborar con el programa Propedéutico de la PUCV. Éste es un paso hacia el fortalecimiento de nuestra comunidad académica y la formación de la próxima generación de ingenieros bioquímicos. La colaboración con la EIB refuerza los objetivos de Propedéutico, brindando a los estudiantes una experiencia académica de primer nivel en campos de alta demanda y potencial para innovación", comentó el director Escuela de Ingeniería Bioquímica, David Jeison.
Así, los talleres cumplieron con el objetivo de mostrar a las y los estudiantes las carreras que ofrece la PUCV mediante una preparación académica intensiva, y visitas con aprendizajes prácticos.
“Me divertí mucho creo que fue una experiencia interesante y todos fueron muy amables a la hora de desarrollar la actividad. El laboratorio estaba muy completo y era muy bonito, me gustó por que se veía que era un lugar que te entregaba muchas posibilidades para experimentar y trabajar”, comentó Renata Blas, quien participó en el taller de ingeniería química, del Colegio Winterhill de Viña del mar.
“Me encantó el taller de bioquímica diría que es uno de los más entretenidos de los que he asistido, participó todo mi grupo y hable con más compañeros, así que pienso que estuvo super. Realizamos un tipo de experimentación. Ese taller estuvo muy bien para ver lo básico y entender un poco sobre lo que va la carrera”, expresó Paulina Muñoz, estudiante del liceo es José Cortés Brown-Recreo, sobre el taller ingeniería bioquímica.
“Me pareció muy interesante. Es de mis primeras opciones en ingeniería y aprendí mucho, que la carrera podía o no ser lo que esperaba, es justo lo que quiero, me pareció excelente. Aparte los chicos eran muy buena onda y respondían muy bien a las preguntas que les hacíamos” , dijo Gail Díaz, quien participó del taller ingeniería química, y estudia en el Colegio Santa Clara de Valparaíso.
“Me gustó mucho porque fue todo muy detallado, que nos dieran diplomas o regalos lo encontré muy bonito. La actividad en sí me gustó, que nos hicieran algo práctico en lugar de una charla, porque así pudimos ver bien como es el área y el laboratorio y conocer la sede también de la carrera”, reflexionó la estudiante del Colegio Esperanza de Quilpué, Macarena Briceño sobre el taller de ingeniería química.