06.10.2021

El estudiante egresado de la Escuela de Derecho de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), Benjamín Donoso, desde hace un tiempo decidió utilizar lo aprendido en sus años de carrera en un nuevo proyecto, donde ha tenido que incursionar en otras áreas y adquirir nuevos conocimientos. Así nace el emprendimiento MiCondena.cl, plataforma virtual que busca acercar el conocimiento jurídico a las personas a través de la tecnología y un lenguaje claro, por medio de una sección de noticias, podcast con abogados y una calculadora penal.

Este proyecto ha sido apoyado por distintas instancias de la PUCV y, actualmente, durante 2021 se adjudicó la Convocatoria Concursos DIE de la Dirección de Innovación y Emprendimiento de la Universidad. En este contexto, donde reciben el apoyo del ecosistema de emprendimiento PUCV, siendo partícipes de talleres de formación, asesorías y financiamiento.

Benjamín Donoso contó cómo nace este proyecto, cuál ha sido su evolución dentro del tiempo en que comenzó y cómo pretender continuar avanzando a través de concursos y autogestión.

¿Cómo nace Micondena.cl?

La idea surge a partir de una visita que tuve que realizar en tribunales por un ramo de la Universidad, sucedió que una persona que estaba siendo imputada por haberse robado unas zapatillas, tuvo mala comunicación con el abogado defensor y aceptó una condena que no era la que ella creía que tendría. Aquí pensé que hay un claro problema de comunicación y que esto se podría subsanar implementando una herramienta tecnológica y así nace la idea de una calculadora penal, donde las personas puedan contestar preguntas y tener más información a su disposición.

¿En qué consiste esta calculadora?

Permite a cualquier persona calcular una condena probable para todo tipo de delito en nuestro país, contestando simples preguntas y en dos simples pasos que es entrar a micondenac.cl y contestar las preguntas. Esta herramienta fusiona el derecho con la tecnología, ya que funciona en base a un algoritmo, donde a medida que la persona va contestando preguntas generales se van especificando y todo esto en un lenguaje súper claro para que cualquiera lo pueda entender.

¿El sitio web ya está funcionando?

Sí, actualmente ya está en línea en una fase de prototipo y uno de los objetivos en nuestra adjudicación de los Concursos DIE es que nos permita ir perfeccionándolo. Pese a esto, ya contamos con un prototipo que funciona para testear y ver como responden posibles usuarios, para así ir mejorando. No le hemos hecho campaña, sino que lo lanzamos de manera preliminar para ir testeando.

¿Cómo ha sido el proceso desde la creación de Micondena.cl?

El año pasado comenzamos, el primer concurso con el que conseguimos financiamiento fue con Ideas X de Santander, ahí levantamos el primer capital que funcionó para comenzar a desarrollar el prototipo, ese año también participamos en el Concurso The Lift PUCV donde nos fue bien.

Ahora en 2021, hace unas semanas fuimos finalistas del Concurso Impacto Emprendedor del Banco de Chile, donde fuimos seleccionados de 350 propuesta entre los 10 mejores y ahí logramos adjudicar cerca de un millón de pesos y, también, nos ganamos el Concurso DIE, que es la misma cantidad y además nos entregan apoyo en formación donde nos incubamos en Chrysalis.

¿En qué etapa se encuentran actualmente?

Estamos en una fase de prototipado y testeo con el usuario, en conjunto con un estudio de mercado. Tenemos la página arriba, estamos viendo las dificultades que enfrentan las personas al entrar, las herramientas que les cuesta utilizar y las que les pueden ser útiles para potenciarlas. Especialmente nos gustaría ir mejorando la calculadora, para que sea más efectiva.

¿Cómo valoran el apoyo que les ha dado la Universidad en distintas instancias?

El apoyo realmente siempre ha sido excelente, recuerdo que cuando tuve la idea de la calculadora penal tenía miedo y pensaba hacerlo solo y no contarle a nadie para que no me robaran la idea y ese es el típico miedo del emprendedor que dice que si uno cuenta su idea se la pueden robar, la verdad es que con la experiencia ya lo descarté y me di cuenta que es un ecosistema que busca colaborar entre sí. En ese momento, me acerqué a The Lift, me dieron mucha confianza porque trabajan con emprendedores, tienen sus términos y condiciones y nunca van a divulgar información sin el consentimiento.

El apoyo ha sido constante y por distintas incubadoras de la Universidad, nos han hecho evaluaciones, nos apoyan con difusión, hemos tenido cursos. También hemos tenido el apoyo de Chrysalis y de la Dirección de Innovación y Emprendimiento.

Aparte del apoyo económico, siempre nos hemos sentido acompañados por las personas de la Universidad, siempre hemos podido contar con ellos, incluso en temas de vinculación.

¿Quiénes conforman el equipo de Micondena.cl?

El equipo ha ido variando durante el tiempo, actualmente, somos tres personas. Se sumaron dos compañeros de colegio que por este proyecto nos volvimos a juntar, uno es Andrés Musso que estudia Ingeniería Industrial en la Católica de Santiago y el otro es Banjamín Vallejos que estudió Ingeniería Comercial en la UAI y, actualmente, está haciendo un doctorado en la misma Universidad.

Los tres actualmente somos socios, ya formamos la empresa y estamos avanzando, pero de momento, ya estamos constituidos como empresa.

¿Como se sustenta económicamente este proyecto?

Nuestro modelo de negocios se sustenta en entregar estas herramientas del sitio web de manera gratuita a las personas y, si realmente estos usuarios necesitan una asesoría legal más especializada los ponemos en contacto con abogados de confianza, los que pagan mensualmente por estar dentro de la plataforma, además de un porcentaje por la derivación del prospecto que sería este usuario.

¿Qué esperas lograr de este proyecto de aquí a unos años más?

Esperamos que esto ya no sea un proyecto, sea un negocio propiamente tal, queremos brindar este apoyo informático y de acceso a la justicia y a la información del derecho. Nuestro objetivo es acercar el conocimiento jurídico a las personas y esperamos en dos años cubrirlo al menos en el área penal.