Cómo logró incorporar su profesión, siguiendo su pasión por el cine

24.07.2024

Su camino ha sido de todo, menos convencional, llevándola desde un estudio jurídico a los sets de cine y televisión, algo que tal vez nunca proyectó cuando ingresó a estudiar Derecho en la PUCV, en el 2013. Hoy cumple un rol fundamental en diversas producciones cinematográficas.

Al egresar en 2018, decidió tomarse un respiro y explorar el mundo. Así, emprendió un viaje a Australia, donde pasó un año trabajando principalmente como mesera. Este tiempo le permitió reflexionar sobre sus verdaderas pasiones y le brindó una perspectiva fresca sobre sus objetivos profesionales.

Desde joven, Gabriela había sentido una atracción por el cine, un sueño que estuvo en segundo plano durante sus años universitarios. Al regresar a Chile, decidió seguir su instinto y se inscribió en un diplomado en Producción y Ejecución Audiovisual en la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC). Este curso fue un punto de inflexión en su vida, abriéndole las puertas al mundo del cine y la producción.

"Empecé a incursionar en producción con compañeros del diplomado," comenta, "pero laboralmente trabajaba en un colegio en la parte de administración. Además, siempre he ejercido en forma independiente como abogada, con clientes privados y estuve algunos meses en un estudio jurídico." 

Gracias a su formación y su inquebrantable determinación, Gabriela comenzó a trabajar en diversos proyectos audiovisuales, ganando experiencia y forjando valiosas conexiones en la industria. Su talento y esfuerzo no pasaron desapercibidos, y pronto recibió una oportunidad de trabajar como "clearance" para la serie de Netflix “Baby Bandito”.

"Actualmente estoy trabajando en un proyecto de una serie para una plataforma de streaming”. Mi rol es clearance, que viene de 'limpieza', es un cargo nuevo en Latinoamérica, que surge con el auge de las plataformas, las que vienen con otros requisitos más apegados a la legislación y a los derechos de autor", explica.

La tarea de clearance es trabajar en todas las etapas del proyecto, levantando riesgos que puedan surgir de derechos de autor, de marcas y derechos de la personalidad o privacidad, esto mediante el análisis constante del proyecto con propósito de examinar, ajustar o eliminar cualquier contenido que pudiera causar reclamos por parte de terceros. "Me adelanto a los riesgos en todas las etapas de la producción," comenta.

“En la preproducción de un proyecto es cuando se levantan la mayoría de los riesgos o alertas. Por ejemplo, si se va a ocupar una canción o un personaje en un diálogo va a citar un poema, veo cuáles son los derechos detrás de eso. También en lo que se va a ver en pantalla, ya sea la ambientación de una escena o elementos de utilería”, explica. Por otra parte, en el rodaje mismo, se debe fiscalizar o pueden surgir necesidades nuevas, como, por ejemplo, algún cambio que quiera el director, según señala Gabriela. 

En la postproducción se revisan los cortes finales y es el último momento en que se pueden arreglar cosas. “Por ejemplo, si en rodaje fue inevitable que saliera un cartel, hay que ver cómo sacarlo en postproducción si no se tienen esos derechos”, explica la Alumni de Derecho.

Trabajar en un ambiente creativo y multidisciplinario es uno de los aspectos que Gabriela más disfruta. "Hay que tener en cuenta que se trata con el área creativa, entonces hay que ver todo para minimizar los riesgos, pero eso va de la mano con que se cumplan las expectativas creativas de los equipos. No decir siempre que no, sino ver qué tan importante es para lo creativo y el margen en que podemos movernos”, señala.

En la rigurosidad que debe poner en cada producción, está también el sello de Derecho PUCV: “En la Escuela aprendí una forma de cumplir siempre responsablemente, ordenar, gestionar el trabajo, la forma de hacer las cosas. En buscar conocer algo a fondo, no solo por encima, profundizar, evaluar los eventuales conflictos de derechos con doctrina, con jurisprudencia, con razonamiento bien argumentado”, explica.

Sobre su proyección en esta labor, señala: "Me gusta y me proyecto. Es un ritmo de trabajo complejo eso sí, sobre todo cuando es rodaje, las jornadas son de 11 horas, a ratos se hace pesado, pero en general me gusta. Me veo en el rubro audiovisual, aunque no siempre en giras tal vez por lo desgastante que son," comenta Gabriela. Con el objetivo de seguir especializándose, pronto comenzará un Máster en Derecho del Entretenimiento en el Instituto Superior de Derecho y Economía en Madrid (España), en formato online.

Gabriela es un ejemplo vivo de cómo seguir las pasiones puede llevar a lugares deseados. Su historia es una inspiración para muchos jóvenes que buscan encontrar su verdadero camino, demostrando que, con esfuerzo y dedicación, es posible alcanzar grandes metas, incluso si estas parecen estar muy lejos del punto de partida original.

En este sentido, tiene un consejo valioso para las nuevas generaciones de estudiantes de derecho: "Les diría que se atrevan a mirar más allá de lo tradicional, abogados se necesitan en muchas áreas y lugares, hay mucho campo más allá de lo que siempre se muestra. Si hay alguien que no está tan convencido de lo típico, que vea qué camino le gusta y eso igual estará regulado por el derecho."

Facultad y Escuela de Derecho PUCV